McKinsey & Company ha publicado recientemente su informe llamado Women in the Workplace 2023. Es un estudio en el que hacen balance sobre el estado de las mujeres en el ámbito corporativo en América, el cual ha dejado bastantes datos reseñables.
Entre 2015 y 2023, más de 900 empresas participaron en el estudio, y se encuestó a más de 450,000 personas acerca de sus experiencias laborales. En este report se recoge información de 276 organizaciones participantes que emplean a más de 10 millones de personas, han encuestado a más de 27,000 empleados y realizado entrevistas con personas de diversas identidades, incluyendo mujeres racializadas, mujeres LGBTQ+ y mujeres con discapacidades.
Entre varios asuntos, se resalta la necesidad de centrarse en los puestos de nivel de entrada y garantizar que las mujeres y las mujeres racializadas tengan igualdad de oportunidades para avanzar. Al abordar el «escalón roto», las empresas pueden crear una tubería de liderazgo más diversa e inclusiva. No obstante, el balance es positivo, hay un mínimo crecimiento favorable a los perfiles femeninos en los altos cargos en los últimos años, lo que evidencia que el techo de cristal para las mujeres en general está empezando a ceder.
¿Cuáles son los beneficios de la diversidad de género en el liderazgo?
El estudio señala que las empresas con equipos directivos más diversos en cuanto al género tienden a tener un mejor rendimiento financiero y son más innovadoras. La diversidad de género en el liderazgo también puede mejorar el compromiso y la retención de los empleados, así como mejorar la reputación y la marca de una empresa. El informe enfatiza que la diversidad de género en el liderazgo no es solo un imperativo moral, sino también un imperativo empresarial. Al crear un entorno de trabajo más inclusivo y diverso, las empresas pueden cosechar los beneficios de una fuerza laboral más comprometida e innovadora.
¿Qué pueden hacer las empresas para mejorar la diversidad de género en el liderazgo?
En base a los resultados que ha arrojado el informe, también se ofrecen varias recomendaciones para mejorar la diversidad de género en el liderazgo. Algunas de ellas incluyen:
- Establecer objetivos claros de diversidad: Es recomendable que las empresas establezcan objetivos claros y medibles para aumentar la diversidad de género en el liderazgo y hacer que estos objetivos sean parte integral de su estrategia empresarial.
- Proporcionar capacitación sobre prejuicios inconscientes: Sería óptimo proporcionar capacitación a los empleados y líderes empresariales sobre prejuicios inconscientes y cómo pueden afectar la toma de decisiones y la promoción de la diversidad.
- Implementar políticas de trabajo flexible: Las empresas deben implementar políticas de trabajo flexible que permitan a los empleados equilibrar sus responsabilidades laborales y personales. Esto puede incluir opciones como el trabajo a distancia, horarios flexibles y licencias familiares.
- Crear programas de mentoría y patrocinio: Las empresas deben crear programas de mentoría y patrocinio que ayuden a las mujeres a desarrollar habilidades y establecer conexiones con líderes empresariales.
- Evaluar y mejorar los procesos de contratación y promoción: Las empresas deben evaluar y mejorar sus procesos de contratación y promoción para garantizar que sean justos e imparciales y no estén sesgados hacia ningún género.
- Fomentar una cultura inclusiva: Las empresas deben fomentar una cultura inclusiva que celebre la diversidad y promueva la igualdad de oportunidades para todos los empleados.
Estas son solo algunas de las recomendaciones que se ofrecen en el informe. Al implementar estas y otras estrategias, las empresas pueden mejorar la diversidad de género en el liderazgo y crear un lugar de trabajo más equitativo y exitoso para todos los empleados.
¿Cómo puede ayudar el servicio RPO en estas situaciones?
Un servicio de RPO (Recruitment Process Outsourcing) puede desempeñar un papel importante en ayudar a una empresa a cumplir con las recomendaciones mencionadas para aumentar la diversidad de género en su fuerza laboral y promover la inclusión. Un RPO puede:
- Identificar las áreas donde se necesita mejorar la representación de género, establecer metas cuantitativas y ayudar a integrar estos objetivos en la estrategia de recursos humanos y reclutamiento.
- Ayudar a diseñar y ofrecer programas de capacitación personalizados para empleados y líderes empresariales.
- Asesorar sobre la implementación de políticas de trabajo flexible.
- Ayudar a identificar líderes empresariales que estén dispuestos a actuar como mentores o patrocinadores para las mujeres en la organización.
- Llevar a cabo una revisión exhaustiva de los procesos de contratación y promoción existentes para identificar posibles sesgos de género.
- Colaborar en la promoción de una cultura inclusiva. Esto implica trabajar en estrecha colaboración con los departamentos de recursos humanos y liderazgo para establecer políticas y prácticas que celebren la diversidad, promuevan la igualdad de oportunidades y creen un entorno donde todos los empleados se sientan valorados y respetados
En resumen, un servicio de RPO será un socio estratégico clave para ayudar a una empresa a cumplir con estas recomendaciones al proporcionar experiencia en reclutamiento, desarrollo de políticas y procesos, y apoyo en la creación de una cultura empresarial inclusiva y diversa.